La Alimentación para la Salud
En los últimos años se ha demostrado que la alimentación, nuestra fuente esencial de vida, constituye uno de los principales factores de riesgo para la salud.
Las pruebas científicas de que hay un vínculo evidente entre la alimentación y algunas enfermedades (o incluso la mayor parte) son hoy en día suficientes, indiscutibles y del todo impresionantes.
Los estudios que se refieren al efecto de la alimentación sobre la salud y la esperanza de multiplicaron y ahora estamos seguros de que los alimentos que se absorben cada día no solo permiten que el organismo funcione, sino también influyen directamente en el estado de la salud, con lo que inciden en la condición física, el bienestar, la vitalidad y la longevidad. La prevención y el tratamiento de muchas enfermedades, incluso graves, justifican los aportes variados y equilibrados de “nutrientes” (azúcar, grasas, proteínas) y suficientemente rico en “micronutrientes” (minerales, vitaminas, etc)
Unas buenas recomendaciones alimenticias contribuyen al menos en parte, a proteger al organismo, reforzar los sistemas de defensa, facilitar las capacidades de recuperación y evitar las enfermedades o minimizar sus consecuencias.
Deseamos no sólo convencerlo de los beneficios de una “alimentación para la salud” porque es selectiva, variada, equilibrada y complementada sino, antes que nada, ayudarlo a ponerlo en práctica.