Circulo vicioso en el que caemos y nos hace perder el control de nuestro peso
Quienes no han sufrido los conflictos de llevar un peso excesivo a cuestas, jamás comprenderán los motivos que hacen que a una persona que ha mantenido un sobrepeso toda su vida, le resulte tan difícil bajar de peso.
No trates de explicar o justificar tu gordura… no vale la pena, porque nadie va aceptar tus explicaciones; su situación actual sólo le concierne a usted, y en sus manos está la fórmula para resolverla. Si es importante que sepas que en la mayoría de los casos el exceso de peso se debe a una combinación de factores físicos y emocionales. Además de los factores genéticos.
Disminuir el consumo diario de calorías, e incrementar el nivel de su actividad física, no todo el problema de peso de las personas obesas, puede resolverse de esta manera tan fácil, lamentablemente. Comemos en exceso por muchas razones síquicas y emocionales, y por lo tanto debemos utilizar la mente y hasta el corazón, para determinar cuál es la causa real de tu sobrepeso y saber cómo controlar las exigencias dictatoriales de un estomago al que pocas veces se le han impuesto restricciones.
Diferentes estudios sicológicos, realizados a nivel internacional, demuestran que la obesidad, en una inmensa mayoría de los casos, es producto de un círculo vicioso en el que nos vemos confundidos.
Este círculo vicioso funciona de la siguiente manera:
Comemos en exceso (por cualquier motivo…ya sea como refugio ante problemas emocionales y frustraciones, o por llevar una vida social muy activa, o por necesidades de negocios, etc)
Engordamos, comenzamos a sentirnos frustrados por nuestra apariencia, y disgustados con nosotros mismos porque somos consientes del que ser diferentes es culpa nuestra, únicamente nuestra.
Nos hacemos el propósito formal de comenzar un régimen alimenticio balanceado, pero nuestro razonamiento nos traiciona y pensamos que ya estamos tan gruesos que en verdad nadie notara si aumentamos uno kilos más. Así, damos rienda sueltas a toda nuestra voracidad, e ingerimos aquellos alimentos (golosinas) que más nos satisfacen, pero que siguen aumentando nuestro peso porque casi siempre son los de más alto valor calórico.
En realidad lo que estamos haciendo es auto-castigándonos en un círculo vicioso de auto-destrucción… y esta compulsión debe ser interrumpida. De otra manera, los excesos a los que somos capaces de llegar en lo que se refiere a nuestra alimentación, no tienen límites.