La Piña Excelente para su Esqueleto y Estómago
Mantiene fuerte los huesos, mejora la digestión, alivia los síntomas del refriado, reduce el riesgo de sufrir cáncer y enfermedades del corazón.
La piña es una mina de magnesio para los huesos, todos sabemos que necesitamos calcio para evitar la osteoporosis, una enfermedad que debilita los huesos y que afecta en principal medida a las mujeres después de la menopausia. Un hecho no tan conocido, por el contrario, es que nuestros huesos también necesitan magnesio. El cuerpo utiliza el magnesio para producir colágeno, una proteína fibrosa y resistente que ayuda a construir los tejidos conectivos como los huesos, la piel y los cartílagos. Las investigaciones han demostrado que una carencia de la piel y los cartílagos. Las investigaciones han demostrado que una carencia de manganeso provoca problemas óseos parecidos a la osteoporosis. Una tasa de piña fresca en trozos o de jugo de piña le proporciona más de 2 miligramos de manganeso, lo cual equivale a más del 100 por ciento de la cantidad diaria recomendada de este elemento.
Desde hace siglos, la piña se conoce por sus virtudes para calmar la indigestión y es posible que la ciencia haya dado con el motivo para ello. La piña fresca contiene bromelina, una enzima que descompone las proteínas y de esta manera facilita la digestión. Es posible que esta cualidad sea importante para algunas personas mayores que tengan un bajo nivel de ácido estomacal, imprescindible para digerir las proteínas.
Por mucho que le encante la piña es poco probable, por supuesto, que la vaya a comer todos los días. No obstante si usted es mayor y sufre de indigestión con frecuencia, unas cuantas rebanadas de piña como postre tal vez ayuden a mantener tranquilo el estómago.