La fibra, el gran limpiador del organismo

La fibra es el material que integra las paredes celulares de las plantas, dándoles la rigidez necesaria para mantenerse erguidas. Es uno de los componentes más abundantes de la naturaleza. Por lo tanto, sin fibra las plantas, vegetales, frutas y cereales no tendrían la firmeza y la textura que los caracteriza.

El organismo no digiere la fibra, porque el sistema digestivo no cuenta con las enzimas o sustancias digestivas que puedan desintegrar o desdoblar este material. Como resultado la fibra pasa casi intacta a través del tubo digestivo, dando cuerpo y volumen al bolo alimenticio y finalmente, al material de desecho.

Por muchos años se creyó que la fibra no era necesaria porque no se podía digerir. Por el contrario, se pensó que para mejorar los alimentos debía eliminarse por medio del procedimiento industrial. Actualmente la fibra alimentaria es considerada como un elemento esencial de la nutrición humana. Aunque se ha reconocido que la fibra juega un papel importante como laxante, el interés actual está enfocado hacia sus posibles efectos preventivos contra enfermedades como la diabetes, cáncer de colon, divertículos, hemorroides, obesidad y enfermedades cardiovasculares. Las investigaciones demuestran que en las poblaciones con dietas ricas en fibra existe una menor incidencia de estas enfermedades, en comparación con otras poblaciones, especialmente del mundo occidental, que consumen una dieta baja en fibra.

La fibra se encuentra exclusivamente en alimentos de origen vegetal y se concentra especialmente en la cáscara y en las capas externas de los mismos.

Son alimentos fuentes: el salvado (cubierta externa de los cereales, cereales de grano entero, pan y galletas integrales, frutas y vegetales, leguminosas, frutas secas.

La cantidad de fibra va aumentando a medida que la planta crece. Por otro lado, hemos visto que la fibra se concentra normalmente en la cáscara y en las capas externas de las frutas. Por esta razón puede perderse en el momento de pelarlas. Igualmente sucede al prepararlas en jugo; en lo posible se recomienda consumirlas «enteras».

Actualmente se consiguen en el mercado alimentos elaborados con cereales y harinas integrales con el fin de aportarle al organismo esta sustancia tan importante para la salud.